martes, 22 de febrero de 2011

SOMBRAS Y PENUNBRAS


Soneto

Esas noches de sombras y penumbras
que cada cierto tiempo se presentan,
te ahogan las llamas que alimentan
a esa trémula luz con que te alumbras.

Esas, qué tanto tú te apesadumbras,
cuando llenan tu casa y se aposentan,
esas, que te apenan y te atormentan,
y que nunca a ellas te acostumbras.

Cuando tu gaviota haya tornado
de ese mar buscando lo perdido
y su cielo se encuentre despejado,

esas noches negras se habrán ido.
Te asomarás a tu balcón acicalado
y verás la golondrina en su nido.

C. Abril C.

De Inquietud permanente

(c) copyright

No hay comentarios:

Publicar un comentario