sábado, 3 de septiembre de 2011

AMISTAD



Octosílabos a voleo 


Me tienes en tu ventana
¡asómate cuando quieras!
 yo a ti niña no te obligo,
porque si tu no quisieras
descerrajar el postigo,
no lo vería un castigo,
serian buenas maneras.

Que en esta nave sin calma
atestada de troneras,
te pueden partir el alma
con puñaladas traperas.
Pero... oye lo que te digo,
la navaja mía, niña,
ya no maneja ese estilo
desde que yo en una riña
mellé su cortante filo.
Y desde entonces chiquilla
utilizo esta navaja
para untar la mantequilla.
Así que, si osas untarte
no tengas miedo cortarte,
porque el peligro más grande
será, permitir besarte.

Se me olvidaba otra cosa.
Siempre comparé la amistad
con la delicada rosa,
esa que luce en el rosal,
no marchita en un florero
ni muriéndose en un ojal,
ni colocada en tu pelo,
ni exhibida en el mercado.
Ha de vivir sin recelo,
como el afecto personal
...Puro y desinteresado.


C. Abril C.


De Inquietud permanente


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