Serventesios con estrambote
Al pasar un día por aquél puente,
vio que el agua del río desgastaba,
los pilares de esa obra imponente
que tan buenos servicios les prestaba.
Y a contarlo corrió precipitado
al regidor que habían elegido,
ese que tanto había pregonado
y tanto les había prometido.
Pero no le recibió aquél eructo,
pusilánime, fatuo y prepotente.
Le daba igual la vida del viaducto
o el daño que causara la corriente.
!Del ayer siempre me olvido
y el mañana es mi presente!
C. Abril C.
De Bajo este cielo
(c)copyright
No hay comentarios:
Publicar un comentario